Song | Boca en la tierra |
Artist | Vetusta Morla |
Album | Mapas |
Download | Image LRC TXT |
Nos dejaron las balas | |
y un enjambre de abejas | |
ése fue su tesoro y una noche oxidada. | |
Nos alzaron en brazos | |
descubrimos planetas | |
nos creímos tan fuertes como héroes de guerra. | |
Y en mitad del relámpago llegó el mal de altura | |
fuimos sed en el aire pero boca en la tierra. | |
Ahora alumbras las horas | |
con guiños que se escapan | |
cubriendo el recuerdo con bandejas de plata. | |
Y nos echamos tanto de menos | |
que nos da por despegar | |
en avenidas de pegamento, clavados por las rodillas. | |
Y en mitad del relámpago llegó el mal de altura | |
fuimos sed en el aire pero boca en la tierra. | |
La antena está abierta esperando una señal | |
la señal que no llega a esta sala de espera es una eternidad. | |
Y el tesoro perfecto lo cubrió la tormenta | |
con aviones cruzándose en la noche más negra. | |
Y en mitad del relámpago llegó el mal de altura | |
fuimos sed en el aire pero boca en la tierra. |
Nos dejaron las balas | |
y un enjambre de abejas | |
e se fue su tesoro y una noche oxidada. | |
Nos alzaron en brazos | |
descubrimos planetas | |
nos crei mos tan fuertes como he roes de guerra. | |
Y en mitad del rela mpago llego el mal de altura | |
fuimos sed en el aire pero boca en la tierra. | |
Ahora alumbras las horas | |
con gui os que se escapan | |
cubriendo el recuerdo con bandejas de plata. | |
Y nos echamos tanto de menos | |
que nos da por despegar | |
en avenidas de pegamento, clavados por las rodillas. | |
Y en mitad del rela mpago llego el mal de altura | |
fuimos sed en el aire pero boca en la tierra. | |
La antena esta abierta esperando una se al | |
la se al que no llega a esta sala de espera es una eternidad. | |
Y el tesoro perfecto lo cubrio la tormenta | |
con aviones cruza ndose en la noche ma s negra. | |
Y en mitad del rela mpago llego el mal de altura | |
fuimos sed en el aire pero boca en la tierra. |
Nos dejaron las balas | |
y un enjambre de abejas | |
é se fue su tesoro y una noche oxidada. | |
Nos alzaron en brazos | |
descubrimos planetas | |
nos creí mos tan fuertes como hé roes de guerra. | |
Y en mitad del relá mpago llegó el mal de altura | |
fuimos sed en el aire pero boca en la tierra. | |
Ahora alumbras las horas | |
con gui os que se escapan | |
cubriendo el recuerdo con bandejas de plata. | |
Y nos echamos tanto de menos | |
que nos da por despegar | |
en avenidas de pegamento, clavados por las rodillas. | |
Y en mitad del relá mpago llegó el mal de altura | |
fuimos sed en el aire pero boca en la tierra. | |
La antena está abierta esperando una se al | |
la se al que no llega a esta sala de espera es una eternidad. | |
Y el tesoro perfecto lo cubrió la tormenta | |
con aviones cruzá ndose en la noche má s negra. | |
Y en mitad del relá mpago llegó el mal de altura | |
fuimos sed en el aire pero boca en la tierra. |