Ahora que estás ausente mi canto en la noche te lleva. Tu pelo tiene el aroma de la lluvia sobre la tierra. Y tu presencia en las viñas doradas de luna se aleja, hacia el corazón del vino donde nace la primavera. Mojada de luz, en mi guitarra nochera, ciñendo voy tu cintura encendida por las estrellas. Quisiera volver a verte, mirarme en tus ojos, quisiera. Robarte guitarra adentro hacia el tiempo de la madera. Cuando esta zamba te cante, en la noche, sola, recuerda, mirando morir la luna, cómo es larga y triste la ausencia.