[Letra de "Presidiario"] [Verso 1] Ya no me quedan fuerzas para empresas vanas La desilusión que emana de la gana consumida La equidad de los días, la sequedad de esta rutina La ausencia de experiencias sin la opción de recibirlas Privado de toda alegría, mi corazón bombea y sangra Y si las cosas cambian, tardan las mías Ahora injurio envenenado Títere del desengaño Contra quienes predicaron la sanación de los años Solo encuentro tristezas en refugios de certezas No me alivian las mentiras con las que otros se alimentan Prescindo de creencias, renuncio a esa anestesia Si voy a estar muerto hazme sufrir y no me mientas Se me agota la última gota de paciencia Sumido en una interna eterna desavenencia A veces emergen fatuos egos en carencias Porque ni el mártir se sustenta sin caricias [Coro] Quiero dolores nuevos, que duelen menos Que aquellos que yacen enquistados en mi seno Mi ánima clama novedades que suplanten Esta sempiterna cotidianidad hiriente Jodido para siempre y desde siempre Enemigo del amor no recibido Envidio a lo inorgánico y su muerte Pues su estado ausente no siente martirio [Verso 2] Nostalgia, esa tristeza inaprensible Exceso doliente de un pasado insaciado Que a las puertas semiabiertas de una memoria apegada Se apersona imperativo y con reclamos Hay cosas que si no me llevan a la gloria, me llevaré a la tumba Cuando fallezca, ahórrense las flores y la tristeza Ahórrense la asistencia, las lágrimas y el luto Que este difunto no merece la atención Que su cuerpo no obtuvo cuando estuvo vivo Váyanse ya, y sin pagar la cuenta Mi inexistencia no se apena por un nicho Ansiedad, hipocondría, y malestares: Sepultureros de toda paz y sosiego Ya no sé si es paranoia o realidad Me la ha vuelto a jugar el miedo al miedo Los recuerdos me persiguen como sombras Soy una amalgama de ilusiones rotas Hay circunstancias que no perdonan Hay heridas que con los años empeoran Ojalá pudiese creer en tus dioses Culpar al demonio de mi infortunio Acobijarme en la cálida idea de un cielo Por el que valga la pena haber sufrido Hay anhelos aspirando ser momentos Hay pérdidas que esperan a que las resarza el tiempo No hay magnitud que mida este dolor intenso Ni palabras ni versos que definan esto Confiaba en que las cosas mejorasen, pero no Ya he intentado todo amago de encontrar la solución Que quisiera suicidarme tal vez sería lo mejor Lo malo es querer vivir y estar en esta situación Quiero dolores nuevos, que duelen menos Que aquellos que yacen enquistados en mi seno Mi ánima clama novedades que suplanten Esta sempiterna cotidianidad hiriente Jodido para siempre y desde siempre Enemigo del amor no recibido Envidio a lo inorgánico y su muerte Pues su estado ausente no siente martirio Libre en sueños, sin ellos presidiario Soñador lúcido, vividor desquiciado Me recreo en fantasías y me evado; Embustero, artista del autoengaño Bendigo mi libertad onírica Como el tetrapléjico cuando vuela y camina Sólo en ella me siento con valentía Sedado en la normalidad mental de una utopía [Coro] Quiero dolores nuevos, que duelen menos Que aquellos que yacen enquistados en mi seno Mi ánima clama novedades que suplanten Esta sempiterna cotidianidad hiriente Jodido para siempre y desde siempre Enemigo del amor no recibido Envidio a lo inorgánico y su muerte Pues su estado ausente no siente martirio Jodido para siempre y desde siempre Enemigo del amor no recibido Envidio a lo inorgánico y su muerte Pues su estado ausente no siente martirio Jodido para siempre y desde siempre Enemigo del amor no recibido Envidio a lo inorgánico y su muerte Pues su estado ausente no siente martirio