El amor es un rayo de luz indirecta Una gota de paz, una fe que despierta Un zumbido en el aire, un punto en la niebla Un perfil, una sombra, una pausa, una espera El amor es un suave, rumor que se acerca Un timbre a lo lejos, una brisa ligera Una voz en la calma, un aroma de menta Un después, un quizá, una vez, una meta El amor va brotando, entre el aire y el suelo Y se palpa y se siente y hay quien puede verlo Y hace que te despiertes y pienses en él Y te llama despacio, rozando tu piel El amor te hipnotiza, te hace soñar Y sueñas y cedes y te dejas llevar Y te mueve por dentro y te hace ser más Y te empuja y te puede y te lleva detrás Y de pronto te alza, te lanza, te quema Hace luz en tu alma, hace fuego en tus venas Y te hace gritar al sentir que te quemas Te disuelve, te evapora, te destruye, te crea Y te hace viajar, en el filo del tiempo Remontando los ríos de mil universos Y te lleva a la gloria y te entrega a la tierra Y te mira y te ve y piensa y piensa Y de pronto el amor, es la luz de una llama Que se empieza a apagar y se va y se apaga Es la isla pequeña perdida en la niebla Una gota, un no sé, una mancha, una mueca El amor es la hoja caída en la tierra Un punto en el mar, una bruma que espesa Un pelo en el alma, un sol que se vela Un porqué, un según, un ya no, una queja El amor va bajando, peldaño a peldaño Con las manos cerradas y el paso cansado Te pregunta quién eres, para hacerte saber Que apenas te conoce, que qué quieres de él El amor te hace burla, se ríe de ti Mientras tú sigues quieto, sin saber que decir Y deseas seguirle y decirle que no Que se quede, que vuelva, que comete un error Y el amor desbarata tus grandes ideas Te destroza, te rompe, te parte, te quiebra Y te hace ser ese que tú no quisieras Y te empuja a ser malo y te deja hecho mierda Y te arroja de bruces, al último infierno Arrancándote el alma, pisándote el cuerpo Y te ahogas de ansia, de volver a la nada Y de pronto, se para y te ve y se apiada